7 Trucos fáciles y efectivos para Ahorrar Luz en casa

5/5 - (6 votos)

¿Cómo ahorrar en iluminación?

Quiero saber cómo ahorrar luz en la factura de la luz.

No sé qué tipo de bombillas comprar para mi casa.

¿Cómo gastar menos al iluminar la casa?

trucos para ahorrar luz en casa

 

Trucos para Ahorrar al Iluminar la casa

Uno de los mayores gastos en nuestras facturas del hogar es en electricidad. La luz no para de subir y no es algo de lo que podamos prescindir. Además, gran parte de la electricidad que disfrutamos en casa, reflejada en la factura de la luz, se debe a cómo la utilizamos. Uno de los aspectos importantes en los que debemos fijarnos en relación al ahorro de electricidad es en cómo iluminamos nuestro hogar: las lámparas que tenemos, el tipo de bombilla, nuestras costumbres (o malas costumbres), la luminosidad natural de las habitaciones… Todos estos factores influyen mucho a la hora de ahorrar energía eléctrica y también en el impacto energético que le ocasionamos al planeta.

A continuación te vamos a dar 7 trucos para ahorrar en electricidad, concretamente en lo que respecta al uso de la luz en casa. La mayoría de estos consejos para ahorrar luz los hemos obtenido gracias a la compañía eléctrica alternativa HolaLuz.com, que recomendamos por su filosofía, su transparencia y por sus condiciones. Toma nota de los trucos:

 

 

¿No recuerdas qué era? Sí, hombre sí: tu madre decía algo así como… «No dejes la luz encendida si no estás en la habitación» o «Te crees que trabajamos en INSERTA NOMBRE DE LA COMPAÑÍA ELÉCTRICA AQUÍ». ¿Te suena? Puede parecer un consejo para ahorrar luz de lo más evidente, pero es de lo que más pecamos la mayoría. Piensas que «sólo va a ser un momento» pero la vida está hecha de pequeños momentos que son los que suman. Y también suman en la factura de la luz.

Empieza por ahí. Sistematiza el apagar la luz al salir de una habitación por más que sólo sea para ir al baño (a no ser que se trate de una luz fluorescente o de bajo consumo. De esto hablamos más abajo) ¡Si te parece tan fácil y evidente es porque puedes hacerlo!

 

Aprovecha la luz solar

¿Eres de los que se ponen a leer o a trabajar delante del ordenador bien entrada la noche? Te puede parecer muy bucólico, pero además de estar consumiendo energía eléctrica de forma innecesaria, estás desperdiciando las vitaminas de los rayos del sol. ¿Acaso crees que los nórdicos tienen su segunda residencia en Mallorca porque sí?

Contamos con algo que muchos desean. El sol: vivimos en lugares donde disfrutamos muchas horas de luz solar incluso en invierno y por eso mismo no lo valoramos. La luz natural es vida, así que si tienes la oportunidad de aprovecharla, levántate pronto y acuéstate temprano en lugar de hacer lo contrario.

Si vas a mudarte dentro de poco, además, te recomendamos tener en cuenta las horas de luz solar que va a tener cada estancia para determinar qué hacer en ella (si una habitación va a ser un estudio, un salón o una habitación, por ejemplo). Ten en cuenta lo siguiente:

  • Orientación sur, este y suroeste: son las que más horas de luz solar reciben, por lo que son ideales como salón o despacho para ahorrar más luz.
  • Orientación norte, noreste y nordeste: son las que menos horas de luz reciben, se recomiendan para los dormitorios, habitaciones de invitados, o cuartos de los trastos.
aprovecha la luz solar para las habitaciones donde vas a pasar más tiempo
Fuente de la imagen

 

Pinta las habitaciones con colores luminosos

Si estás pensando en cambiar la decoración de tu casa, ten en cuenta este truco para ahorrar en la factura de la luz: los colores claros, sobre todo el blanco, son los que mejor reflejan la luz solar y esto tiene dos ventajas:

  1. Hacen que la habitación parezca más grande.
  2. Hacen que la habitación sea más luminosa, por lo que necesitará una menor cantidad de luz natural o artificial para iluminarla.

Si aún así quieres un toque de color más oscuro, opta por pintar solo una de las paredes y que sea principalmente en las estancias de menos uso.

 

Limpia las bombillas y los globos

Mosquitos, polvo… Las bombillas y sus respectivos globos o pantallas acumulan suciedad. Aunque no lo creas, una bombilla sucia puede llegar a perder hasta un 50% de su luminosidad, lo que se traduce en un ahorro de hasta un 20% en el consumo eléctrico referente a la luz.

Teniendo en cuenta este detalle, seguramente también preferirás poner pantallas más transparentes en zonas donde la luz que necesites tenga que ser más intensa.

 

Ten en cuenta el tipo de luz que necesitas para cada cosa

Luz general, luz de ambiente, luz focal, luz directa, luz indirecta, luz semi-indirecta… Seguramente te hagas una idea de qué diferencia hay entre cada tipo de luz, de lo contrario te recomendamos que leas el artículo que hemos enlazado donde lo explican a la perfección.

La idea es que no utilices el mismo tipo de luz para todo. ¡La diferencia entre elegir un tipo de iluminación u otra es de casi el 20%! En este sentido, lo ideal es iluminar cada estancia con varios tipos de luz que te permitan combinaciones según tus necesidades. Lo mismo sucede con la potencia de cada bombilla. Por ejemplo: una lámpara de pie, una bombilla con pocos lúmenes nos darán una luz de ambiente ideal para ver la televisión o para una cena íntima. Un foco de escritorio con una bombilla descubierta que tenga bastantes lúmenes es ideal para leer o trabajar.

Los reguladores de intensidad también son muy útiles para ahorrar luz ya que te permiten regular la intensidad.

 

Tipos de bombilla

Hay muchos tipos de fuentes de luz: bombillas incandescentes, lámparas de bajo consumo, fluorescentes, luces LED… El abanico de posibilidades puede volverte loco. Nosotros te vamos a dar unos consejos de uso rápidos y prácticos a partir de los errores más comunes que hemos observado, pero si quieres entrar en más detalle, te recomendamos este completo artículo donde explican los tipos de bombilla en profundidad y qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir una:

  • Bombillas incandescentes. Las bombillas de toda la vida. Son baratas pero cada vez se usan menos porque consumen mucho, dan mucho calor, su eficacia lumínica no es la mejor y tienen un impacto medioambiental alto, pero son útiles para lugares de encendido puntual y fugaz, como por ejemplo el pasillo o la luz de la mesita de noche si sólo la usas para unos instantes antes de acostarte.

 

  • Bombillas de bajo consumo (fluocompactas). Su vida útil es de entre 6.000 y 10.000 horas y consumen hasta un 80% menos que las tradicionales. El gasto de encendido es considrable y tardan bastante en encenderse a su máxima potencia, por lo que no se recomienda si se van a encender sólo por un rato (por ejemplo en el baño o en el pasillo), pero son recomendables como luz de ambiente o como luz focal para un escritorio por ejemplo.
  • Bombillas halógenas. Son los conocidos «focos» que se suelen usar en pasillos y salones. Tienen un consumo alto, desprenden mucho calor, pero duran mucho. Iluminan la zona rápidamente porque llegan a su máxima potencia al momento por lo que se recomienda usar en el tocador del baño, por ejemplo.

 

  • Bombillas LED. Son las más eficientes energéticamente y lumínicamente. Y no desprenden calor. Tienen una vida útil de hasta 50.000 horas (más de 30 años si las enciendes 4h diarias) y consumen hasta un 80% menos comparadas con una bombilla normal. Son más caras pero si el uso es el correcto, con ellas se ahorra mucho en la factura de la luz. Esto es: en lugares donde la luz vaya a estar encendida durante mucho rato o donde se encienda y se apague frecuentemente, como por ejemplo el salón.

 

  • Tubos Fluorescentes. Consumen un 80% menos que las bombillas tradicionales pero tardan un rato en encenderse (igual que las de bajo consumo) y no son muy estéticas. Son ideales para estancias donde la luz está encendida muchas horas, como cocinas, oficinas o garajes.

 

 

¿Cuántos Vatios Lúmenes necesito?

No nos confundamos. Más vatios (W) no quiere decir más luz. Quiere decir más consumo energético. Más dinero a pagar en tu factura de la luz. Por ejemplo, una bombilla incandescente (las de toda la vida) necesita 40W para dar unos 400 lúmenes, mientras que una LED da 400 lúmenes con solo 8W.

En la tabla a continuación puedes ver las equivalencias aproximadas entre Vatios y Lúmenes:

tabla comparativa entre vatios y lumenes para cada tipo de bombilla

Para que te hagas una idea, para los lugares de lectura o trabajo necesitarás una luminosidad de 500 lúmenes/m2, mientras que para la cocina o la habitación son suficientes 300 lúmenes/m2. En pasillos o baños es suficiente con 150 lúmenes/m2

 

 

También puedes ver otros artículos parecidos a 7 Trucos fáciles y efectivos para Ahorrar Luz en casa en la sección Trucos para Ahorrar.