¿Cuándo Dividir y cuando no los Ases y los Ochos en Black Jack?

Quiero saber más a fondo sobre la estrategia de dividir parejas de ases y parejas de ochos en el 21 Black Jack.

¿Qué pasa cuando en el Black Jack recibes una mano con dos Ases o dos ochos?

¿En qué casos es recomendable y en qué casos no es recomendable dividir ases y ochos?

Trucos para saber cuándo dividir Ases y Ochos en Black Jack:

El Black Jack es sin duda uno de los juegos de cartas más populares e interesantes. Uno de los factores que lo hacen tan jugable es que no se trate de un juego puramente de azar, ya que para ganar dinero jugando al Black Jack hacen falta estrategia y habilidad matemática.

En el artículo  11 Estrategias matemáticas para Ganar al Black Jack te explicamos cuáles son los mejores trucos y estrategias basados en la estadística y los cálculos de probabilidades, te recomendamos echarle un vistazo si no lo has hecho ya.

En él ya mencionamos dos de las estrategias más conocidas: dividir los ases y los ochos, pero lo hicimos de forma general. En este artículo vamos a profundizar en los motivos para separar (o no) dichas cartas en el Black Jack, y también vamos a definir algo de lo que no hay tanta información en Internet, y es en qué casos no es recomendable dividir ases y ochos.

Par empezar te diremos que para jugar bien los ases y los ochos es necesario entender la estrategia básica del Black Jack (puedes encontrar la tabla de dicha estrategia en nuestro artículo 11 Trucos imprescindibles para Jugar al Black Jack) y cómo contar las cartas. Además, será necesario contar adicionalmente los ases o los ochos, para saber cuántos permanecen en juego.

Tienes toda la información detallada con los consejos para saber cuándo dividir ases y ochos a continuación.

El As es la carta más fuerte en el Black Jack, ya que su valor es de 11 puntos. Sin embargo, una mano con dos Ases jugados a la vez, suman 12 puntos, no 22 (si fueran 22 no tendría sentido jugarlos juntos, porque perderías).

Por lo tanto, en términos generales, dividir los Ases será la estrategia más acertada, dado que te da dos opciones para jugar las dos cartas de forma separado, aumentando así la probabilidad de recibir una nueva carta con un valor de diez, lo cual sería un Black Jack.

Este motivo, y el hecho de que estadísticamente el 12 es un total malo para un jugador de 21 Black Jack, son los motivos que hacen de esta estrategia lo más recomendable.

Hay que tener en cuenta que al dividir los ases en la mayoría de casas de casino físico o casino online, solo recibirás una carta adicional, y esto quiere decir que al dividir tus ases en dos manos diferentes, no podrás pedir ninguna carta más para mejorar las manos restantes.

Además, en caso de volver a recibir otro As tras la división inicial, tampoco se permite dividir los ases por segunda vez.

Para saber cuándo dividir un par de ases te va a beneficiar y cuándo no, es necesario aprender a contar cartas, y, además, utilizar un método de conteo que mantenga un recuento adicional de los ases en juego:

Cuando la baraja sea desfavorable, el recuento será muy alto (-+4, 5, 6 o más). Si te encuentras en una situación como esta, la división de los ases será casi siempre una buena decisión, ya que cuando el conteo es alto quiere decir que en el mazo de cartas del crupier hay más cartas con un valor de 10 que cartas bajas. Esto incrementa las probabilidades de que recibas un 10 por cada As, para así poder conseguir sumar un 21 Black Jack.

Anteriormente hemos visto en qué casos y por qué es recomendable dividir Ases en dichas circunstancias.

Sin embargo, dividir ases no es una máxima, y no siempre será recomendable. Para ello hay que aprender a contar cartas:

Si el recuento llega un número negativo (-1, -2, -3), la cosa se complica. Un recuento en el rango negativo suele significar que la baraja es favorable para la casa. Esto quiere decir que hay más cartas bajas en el mazo que cartas con un valor de 10, por lo que separar los ases puede no ser la mejor opción, sobre todo si el crupier muestra un 10.

Cuando el recuento es negativo y el crupier muestre una carta potente (8, 9, 10), lo más recomendable es no dividir los Ases y pedir carta. La razón es que lo que tienes es una mano llamada «suave» y no hay ninguna carta en la baraja que pueda hacerte pasar. En este caso, sólo podrás mejorar tu mano. Dividiendo los ases podrías convertir una mano perdedora en dos manos perdedoras.

Igual que pasa con los Ases, por regla general los ochos siempre se dividirán.

Al dividir dos ochos, cada carta recibe otra, formando así dos manos. Con estas dos manos puedes pedir, plantarse o doblar, así como con los Ases. Sin embargo, con una pareja de ochos, a diferencia de una pareja de ases, sí es posible dividir de nuevo la mano una segunda o incluso una tercera vez.

A pesar de la norma general que indica dividir las parejas de ochos, hay un escenario donde no es tan beneficioso dividir los ochos: cuando el recuento sea muy positivo y el crupier saque un 9 o un 10. En ese caso tendrás dos opciones: pedir sobre tus ochos o rendirte con esa mano.

El motivo es el mismo que con el de los Ases: si divides un par de ochos contra un 9 o un 10 del crupier, tendrás muchas probabilidades de obtener un 10 por cada uno de tus ochos. Si eso sucede así, tendrás dos manos con un valor de 18 y el crupier también tendrá mucha probabilidad de obtener un 10, con lo que sumaría 19 o 20, ganando tus dos apuestas.

A muchos jugadores de Black Jack les cuesta ceñirse a la opción de abandonar la apuesta cuando se trata de un par de ochos, por lo que es importante recordar que dos ochos suma 16, y esta es la peor mano que se puede tener en el Black Jack, por lo que en una situación como la descrita, es mucho mejor renunciar a la mitad de su apuesta que ver como el crupier se la lleva de calle.

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